Entrevista | Marcos Orengo: «‘La Promesa’ es el mayor proyecto audiovisual en el que he estado»

Conocemos un poco mejor a Marcos Orengo, actor que da vida a Feliciano en la serie ‘La Promesa’, quien adora el mundo de la interpretación, ya sea en el escenario o en una pantalla. 

En Why Not Magazine, conversamos con Marcos Orengo (Madrid, 1997), actor que da vida a Feliciano en la serie dramática ‘La Promesa’, la producción de RTVE. Los diversos capítulos se emiten de lunes a viernes a las 17.30 horas en La 1.

Su carrera profesional comienza en las ‘tablas’, como el actor nos indica con algunas obras como ‘Tiza‘ (2018-2021), con la Joven Compañía Oteyza; ‘Dime que todo está bien‘ (2018-2021) en la Sala Nueve Norte; y ‘Culpables’ (2022). Aunque la producción de RTVE no es su primera aparición, también ha participado en algunas series como  ‘Servir y proteger’ (2020 -2021) y ‘Luna negra’ (2003-2004). Del mismo modo, combina su pasión con el mundo de la música y se dedica a componer piezas musicales.

A continuación, se detalla la entrevista completa con Marcos Orengo en la que hablamos sobre las diferencias entre el teatro y la televisión, cómo ha dado vida a su personaje, algunas cuestiones más personales y sus proyectos futuros.

Sus inicios

Why Not Magazine: ¿Siempre has tenido claro que querías ser actor? 

Marcos Orengo: Es algo que siempre ha estado latente, pero no siempre lo he tenido claro. Cuando era más pequeño no valoraba tanto esa opción como ahora. Empecé de pequeño en ‘Luna negra‘ y disfruté muchísimo, pero no volví a actuar hasta años después. Aunque quise estudiar psicología, acabé estudiando composición musical en la escuela TAI. Al mismo tiempo, empecé a estudiar teatro con Blanca Oteyza porque no vocalizaba bien y mi padre me apuntó a sus clases. Tras unos años, hicimos la obra titulada ‘Tiza‘ y ahí fue cuando revivieron mis ganas de ser actor. 

WN: Has participado en varias obras de teatro, ¿qué diferencias hay respecto a la televisión?

MO: Hay muchísimas diferencias. Primero, porque con el público delante sientes una sensación de adrenalina o una pulsación que no se puede comparar. Luego, el estar sobre el escenario durante una hora y media no tiene nada que ver actoralmente con que te digan cada 5 minutos «corten» o «retomamos esto«. Para mí el teatro significa algo diferente, como de raíz, de estar siempre plantado en medio del escenario.

La cámara es mucho más delicada, suave y con más matiz. Tienes que estar más concentrado, saber lo que estás haciendo y no puedes ser tan abierto. Son actuaciones totalmente diferentes, pero al haberme criado en el teatro le tengo un poco más de cariño a las tablas. Del mundo audiovisual, también me gusta mucho que es un equipo más grande y estás todo el rato hablando con gente, al contrario que en el teatro, que es más íntimo. 

Interpreta a Feliciano en ‘La Promesa’

WN: ¿Cómo ha sido el proceso de darle vida a Feliciano, el personaje que interpretas en ‘La nueva promesa’?

MO: El proceso ha sido complicado. Los primeros meses estuve diciendo a las coachers que no soy este personaje, no tiene sentido que esté aquí. Feliciano es un chico de pueblo que lo ha pasado muy mal, que le maltrataba su padre, un padre borracho, ha tenido que cuidar de él y la casa, era el más pequeño de todos sus hermanos y aún así se ha ocupado de todo.

Ha pasado una infancia muy dura y para mí eso, pero encontré la conexión en los sentimientos de Feliciano, qué es lo que quería y cuáles eran sus objetivos. Creo que hice un personaje muy diferente a lo que esperaba la productora, pero les encantó también. 

WN: ¿Cómo han acogido tus seguidores a Feliciano?

MO: Con todo el amor del mundo. La gente es muy respetuosa y cariñosa. Son fans de ‘La promesa’ y les causa mucha alegría ver a alguien de la serie. Que yo forme parte de esto me gusta y me complace estar dentro de un proyecto tan bonito, que está dando tantas alegrías y que ve tanta gente. 

WN: ¿El vestuario de la serie qué te parece? 

MO: Los trajes al ser de época y estar tan bien hechos, son muy duros. Yo, por ejemplo, llevo muchas capas: pantalón, camisa de tirantes, chaleco y levita. Entonces, no son muy cómodos porque son muy rectos, aunque te ayudan a la hora de interpretar y mantener la postura. En definitiva, el vestuario al ser tan real y tan afín a la época es muy chulo para los personajes.

WN: ¿Te gustaría vivir en la época que se encuentra ambientada la serie? 

MO: Sinceramente no debido a las nuevas tecnologías y las facilidades que tenemos hoy en día. Aunque sí me llevaría la tranquilidad que emplean, ya que había algo más de tiempo para hacer pausas y apreciar lo que tienes. Un ejemplo es cuando Feliciano se come una rosquilla, tras sin haber comido durante mucho tiempo y casi se le saltan las lágrimas. También, las amistades son mucho más profundas con respecto a las relaciones líquidas que tenemos ahora.

Incluso, respecto al amor, que Feliciano está viviendo ahora con Teresa. Para él es muy importante, tiene que cuidarlo, respetarlo y está por encima de todo. Al contrario que ahora, todo es mucho más efímero y rápido. 

Información personal de Marcos Orengo

WN: ¿Cuáles son tus aficiones?

MO: Para empezar, mi trabajo como actor y compositor, aunque no lo veo de esa manera. Me gusta lo que hago, agradezco trabajar en ello y estoy contento de haber tenido la oportunidad de estar haciendo esto y vivir de ello. Además, me gusta bucear, que no lo puedo hacer tan a menudo por el elevado precio, y escuchar música en general, de todo tipo de géneros. También suelo hacer crossfit en el box de mi hermano para descargar energías. Y, por último, conducir, ya que cuando viajé a Islandia me di cuenta de lo mucho que me gustaba.

WN: ¿Qué significa para ti viajar y qué países has visitado? 

MO: He viajado muchísimo y es muy enriquecedor. El último viaje fue a Islandia, el año pasado estuve en República Dominicana haciendo el musical ‘Hoy no me puedo levantar‘ y en Guatemala haciendo de presentador de televisión.

También en Michigan (Estados Unidos), Marruecos, Londres, Alemania, Ámsterdam, Francia, China… Viajar es imprescindible para conocer otras culturas, apreciar dónde vives tú y cómo viven los demás. Por ejemplo, en México hacen las cosas súper despacio en comparación a lo rápido que vamos en Madrid. 

WN: Nos has mencionado también que eres compositor, ¿qué tipo de canciones te gusta componer? 

MO: Yo empecé en la electrónica, siempre digo que toco el sonido, porque a mí lo que me gusta es hacer las canciones que se pinchan. Por ello, me compré una mesa de mezclas, empecé a estudiar producción musical en YouTube y me puse a componer. Me veía tutoriales y seguí poco a poco hasta que llevé tres años y me apunté a la carrera.

Empecé con electrónica, escuchando a Avicii, David Guetta y lo que había en ese momento. Poco a poco, fui escuchando a otros compositores relacionados con el cine, como Hans Zimmer o Johann Johansson. Para mí fueron referentes porque se salieron de la norma y empezaron a usar música electrónica en las bandas sonoras. Luego, acabé en el estudio Reseda de Madrid produciendo algunas piezas de ‘La isla de las tentaciones’.

WN: Nos puedes decir algo de lo que te arrepientas. 

MO: Tengo mucha frustración con el baile y con el canto, que bueno al componer esto último sí que lo manejo un poco más. Sin embargo, me arrepiento de no haber trabajado antes las habilidades de baile y canto. 

WN: ¿Cuál es tu mayor miedo?

MO: Que se me vayan los pies de la tierra y tengo miedo de no ver la profesión con los ojos tan bonitos como la miro ahora, con tanto amor y cariño. Como me gusta tanto lo que hago, siempre está el miedo de que la fama y el dinero desvirtúen lo que siento sobre la profesión y me impidan disfrutar, porque al final son cosas de la industria que no se pueden separar.

Proyectos presentes y futuros

WN: ¿Cuál es el mayor logro que consideras que has conseguido hasta ahora? 

MO: Laboralmente, yo diría que estar en ‘La Promesa’ es el mayor proyecto audiovisual en el que he estado. El hecho de poder estar ahí es un gran logro y una oportunidad que no todo el mundo consigue. También, haber estado actuando seis o siete años aproximadamente y mantenerme tanto tiempo en el teatro también es un logro para mí.

Y, luego, personalmente, seguir respetando fielmente a la profesión y tener buena actitud hacia la misma, aunque sé que todavía llevo poco tiempo. También sigo con los pies en la tierra, que todo esto sea efímero y se acabe. Por ello, quiero disfrutar todo lo que pueda mientras dure, independientemente de donde actúe. 

WN: ¿Cuáles son tus próximos proyectos? 

MO: Algo que quiero hacer cuando acabe ‘La Promesa’, que no sé cuándo será, es montar una productora de teatro. Yo tengo conocimientos en este ámbito porque con ‘Tiza’, la obra que empecé en teatro, me empecé a encargar de la producción cuando llevábamos un año. Durante cuatro o cinco años estuve en la producción, junto con mi compañera Clara, y aprendimos cómo se lleva un equipo de teatro, el tema de los sueldos, gestiones, cómo hacer una gira…

Todas las cosas que he visto ahora quiero ponerlas en práctica y tener mi propia compañía con la que poder hacer obras, sin depender de si me llaman o no. Me gustaría llevar a cabo mi propio proyecto, que sea un bebé al que tenga que cuidar y yo también participe. Sería empezar desde cero: elegir el libreto, que ya tengo uno fichado, escoger los actores, realizar los ensayos… Es un proceso que me apetece mucho vivir.

 

 

Imagen destacada: Transversal Comunicación