Inma Rubiales publicó su nueva novela, ‘Todos los lugares que mantuvimos en secreto’, en enero. Una historia donde el pasado, los reencuentros, las auroras boreales, la nieve y la felicidad son tan protagonistas como Maeve y Connor.

En un cuaderno de partituras del Conservatorio de Música de Almendralejo (Badajoz) al que sus padres le obligaron a ir como extraescolar, Inma Rubiales descubrió con diez años su pasión por la escritura. Las notas de música se convirtieron en letras, en historias. También contribuyó la librería local de su amiga Toni, la primera persona que confió en su don.

Doce años después, Inma Rubiales ya suma siete novelas y más de un millón de lectoras entre España y Latinoamérica. Tres de esas siete novelas tienen por casa a la editorial Planeta, aunque esta autora extremeña sigue apostando por publicar antes sus novelas en Wattpad; plataforma que le ha visto nacer y crecer como escritora.

A principios de este año, en enero, Inma Rubiales publicó su sexta novela: ‘Todos los lugares que mantuvimos en secreto’. Un nuevo éxito que se suma a los fenómenos literarios ‘Hasta que nos quedemos sin estrellas’ y ‘El arte de ser nosotros’, sus dos anteriores novelas. Maeve y Connor, dos amigos de la infancia, son los protagonistas de esta nueva historia.

‘Todos los lugares que mantuvimos en secreto’ de Inma Rubiales

Maeve no sabe mucho sobre sí misma. Solo que no deja de pensar en si su madre cumplió todos sus sueños antes de morir, que la relación con su novio va cada vez peor y que está cansada de que todos sus días sean iguales.

Cuando, por un impulso, acaba comprando un billete solo de ida a la otra parte del mundo para volver al pueblo en el que vivió cuando era niña, lo que menos esperaba era reencontrarse allí con el que fue su mejor amigo de la infancia.

Connor siempre supo que tarde o temprano Maeve regresaría. Lo que nunca pensó es que fuera a ser así. Tan caótica. Tan perdida. Como si aún estuviera por definir. Si el miedo de ambos es desperdiciar sus vidas sin haber hecho nada que merezca la pena, ¿qué mejor que escribir una lista con todo lo que quieren hacer antes de morir y cumplirla juntos?

La oportunidad de vivir

Al otro lado de la ventana, ya huele a primavera. Las flores renacen, el sol brilla diferente y la gente vibra más alegre. Algunas personas, en cambio, aún se resisten a despedirse del invierno; puede que ellas encuentren un refugio temporal en Maeve y Connor y en una Finlandia que esconde tantos lugares como diferentes tipos de nieve.

El tiempo corre, la vida se esfuma. Maeve es consciente de ello cuando regresa a ese pequeño pueblo finlandés que la vio nacer, crecer y marcharse al otro lado del mundo. Un pueblo que le acerca a su pasado: a su madre y a Connor, su mejor amigo de la infancia. Por eso, cuando se reencuentran, él tiene claro que quiere recuperar a esa Maeve que un día soñó con ser feliz. Y una lista escrita a mano con las cosas que quieren hacer antes de morir marcará su destino.

 

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“Me aprendí el nombre completo de Maeve, su canción favorita y todas las cosas que la hacían reír mucho antes de aprender a contar hasta diez”.

Las historias de Inma Rubiales siempre guardan un aprendizaje. La sinopsis puede adelantar que el amor romántico es tan protagonista como sus personajes. Sin embargo, Todos los lugares que mantuvimos en secreto también acoge al amor propio, pero sobre todo habla de la vida. De la vida en general. Con sus momentos buenos y felices, pero también con sus aristas.

Aprender a mirar más allá. Saber encontrar la felicidad en las pequeñas cosas, a veces casi imperceptibles. Hacerlo siempre anteponiéndonos. Entender que el pasado no determina nuestro presente, menos aun nuestro futuro. Y que la vida también se vive y se siente diferente si tienes a gente que te quiere y te apoya. Esa familia que escoges.

“Es curioso que la infancia sea la etapa más feliz de nuestras vidas y también sea la que menos recordamos”.

Acompañamos a Maeve y a Connor en treinta capítulos (más un prólogo y un epílogo) narrados a dos voces y separados en seis partes que marcan la evolución de la trama. Un camino que comienza con el punto de vista de la protagonista, lo que nos permitirá entender su forma de ser, de pensar y de actuar. Maeve es más comedida, más prudente; Connor es todo lo contrario: abraza los momentos y los vive con más intensidad.

Los personajes secundarios también tienen un papel fundamental en el desarrollo de la historia. No podemos hablar mucho de ellos sin hacer spoilers, pero John, Hanna, Luka, Nora o Niko, entre otros, te hacen disfrutar de la historia con una gran sonrisa y con el corazón encogido. Son entrañables.

Por otro lado, destacar la ambientación. Finlandia, en concreto un pequeño pueblo remoto y desconocido a las afueras de Nokia, acoge los pasos de Maeve hacia su pasado, su presente y su futuro. La pluma de Inma, con unas descripciones tan minuciosas y llena de grandes reflexiones, ayudan a que formes parte de Todos los lugares que mantuvimos en secreto; como si la estuvieras viviendo en primera persona.

 

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En definitiva, Inma Rubiales nos ha vuelto a demostrar por qué es una de las autoras nacionales más importantes. Y es que ‘Todos los lugares que mantuvimos en secreto’ esconde una historia de emociones, de amor, de pasado, de segundas oportunidades y de esos momentos felices que a veces se nos escapan. Como dice Maeve: «Estoy viva y eso es una oportunidad».

 

 

Imagen destacada: Javier Ocaña (@inmaarv)