Ana Castillo y Álvaro Mel protagonizan ‘Un cuento perfecto’, la nueva miniserie de Netflix basada en el best-seller de Elísabet Benavent. Un viaje por Grecia y por las novelas románticas, rodado bajo la batuta de Chloé Wallace.
«Érase una vez…». De esta forma han empezado siempre los cuentos, y este cuento perfecto no podía empezar de una manera diferente. «Érase una vez una mujer que lo tenía todo y un chico que no tenía nada».
Margot y David provienen de mundos diferentes. Ella es la heredera de un importante imperio hotelero. Él debe desempeñar tres trabajos para llegar a fin de mes. Cuando la casualidad hace que sus caminos se unan, descubrirán que tienen en común más de lo que ellos creen, y formarán equipo para ayudarse mutuamente a recuperar sus exparejas. Érase una vez una historia de amor entre el éxito y la duda. Érase una vez un cuento perfecto. Y solo tú decides cuál es su final.
David y Margot, los protagonistas de este cuento perfecto
No es ningún secreto que las adaptaciones del papel a la pantalla suelen ser conflictivas. Pues resulta complicado cumplir las expectativas de un lector que ya ha creado en su mente los diferentes personajes y escenarios que conforman la historia.
Sin embargo, podemos decir que este es uno de los primeros grandes aciertos que encontramos en ‘Un cuento perfecto’. El elenco de la tercera adaptación de Elísabet Benavent presume de una química que traspasa la pantalla, consigue adentrar al espectador en la historia y empatizar con los protagonistas.
¿Todavía no conoces a los personajes que dan vida a este cuento? ¡Te los presentamos!
Ana Castillo se pone en la piel de Margot, la heredera de un internacional imperio hotelero que vive bajo la presión de tener que seguir siempre las reglas. Responsable, prudente, con miedo a defraudar a los demás y la necesidad de que la quieran y la validen. Ella tenía una vida supuestamente ‘perfecta’, pero tras huir de su boda, la casualidad hace que se encuentre con David, un desconocido que se convertirá en amigo. Un chico con el que podrá ser ella, sin miedo a ser juzgada. Y le recordará lo que verdaderamente importa para ser feliz.
David es el personaje que interpreta Álvaro Mel. Un chico con horizontes y aspiraciones muy diferentes a las de Margot. Su polo opuesto. Tiene tres trabajos a tiempo parcial que le permiten llegar a fin de mes, escucha música en un iPod y es todo un romántico. No le preocupa lo que piensen los demás y busca ser él mismo a toda costa, ya sea durmiendo en un sofá para no atarse a un alquiler o vistiendo camisetas sin etiqueta con agujeros.
Felipe Hernández | Netflix
Ana Belén es la madre de Margarita, y quiere que su hija sea alguien que en realidad no es: que no tome hidratos, que vaya a fiestas elegantes y, por supuesto, que se case con Filippo, a quien ve como el marido perfecto para su hija.
Por otro lado, Lourdes Hernández e Íngrid García-Jonsson, quienes interpretan a Patricia y Candela, las hermanas de Margot, son sus aliadas y confidentes. Las que verdaderamente entienden y ayudan a Margot a lo largo de este viaje, poniendo a su vez un toque extra de humor a su vida. Son, sin duda, el tándem perfecto.
Jimmy Castro y Tai Fati se ponen en la piel de Iván y Domi. Son los padres de Ada y los mejores amigos de David, que lleva años durmiendo en su sofá. Ellos le animan a valorarse más y a terminar su relación tóxica con Idoia.
Lydia Pavón hace el papel de Idoia, la exnovia de David. Atractiva y superficial, no lo valora tal y como es. Pero todo cambia cuando aparece Margot y empieza a sentir celos por ella.
Por último, Mario Ermito interpreta a Filippo, un hombre que prometía ser el perfecto, aquel que cualquier madre o padre querría para su hija. Cuando Margot sale corriendo de su boda, este le pide tiempo para aclararse, ¿continuarán su historia juntos después del verano?
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Una adaptación a la altura del best-seller
¡Atención! Las siguientes líneas contienen spoilers.
Netflix despide julio a lo grande con la llegada de ‘Un cuento perfecto’, una miniserie de cinco capítulos que aglutina todos los elementos de las comedias románticas. Grecia es la cuna de la historia de amor de los protagonistas. Pero no solamente de un amor romántico, sino también del amor por uno mismo y por volverse a encontrar en un momento en el que pierden el rumbo de sus vidas.
Margot se encuentra perdida, carga con una presión y una responsabilidad que la supera, hasta el punto de sufrir un ataque de pánico y acabar huyendo de su propia boda con Filippo. Por otro lado, David tampoco está en uno de sus mejores momentos. Idoia le acaba de dejar y sus palabras se le han quedado grabadas a fuego en su cerebro.
Felipe Hernández | Netflix
Una noche sus caminos se cruzan, y la química salta a la vista desde el segundo en el que se cruzan miradas. Y no, lo suyo no fue un flechazo amoroso a primera vista, sino que la complicidad y el hecho de compartir mirada triste, se convirtió en una vía para abrirse al otro y ayudarse mutuamente a encontrarse y a recuperar de nuevo a sus respectivas ex parejas, con los que quieren volver a toda costa —aunque en realidad, ni ellos mismos entienden bien por qué—.
A partir de este momento, la amistad entre David y Margot se vuelve cada vez más fuerte, y el guion de Marina Pérez así lo demuestra, haciendo hincapié en la importancia de la amistad al mismo nivel que el amor romántico.
Aun así, el amor también les llega a nuestros protagonistas, y a medida que avanza la trama, sus miradas lo expresan de manera más clara. «Para o me enamoro», —dice David mientras disfrutan de una noche en la isla de Santorini—. Y vaya si lo hacen. Deciden dejarse llevar, descubrir lo que sienten y frenarlo todo al regresar de su viaje por Grecia. ¿Podrán parar su amor por el otro o será demasiado tarde para hacerlo?
Felipe Hernández | Netflix
Una historia en la que tú decides el final
El desenlace de esta historia era otro de los grandes interrogantes de los lectores, pues a diferencia de otras novelas de la autora, ‘Un cuento perfecto’ incluye un final alternativo que se ha mantenido en la adaptación. De esta forma, Elísabet Benavent contribuye a eliminar el tópico de ‘vivieron felices y comieron perdices’, actualizando el concepto del amor romántico, poniendo en duda ciertos clichés y deconstruyéndolos con una visión de amor sano.
«Los valores que te inculcaron no son cadenas. Tú eres libre, Margot. Te he visto serlo. Llevas una armadura hecha de prejuicios contra ti misma que no te deja tocarte la piel, pero es cuestión de tiempo que te pese demasiado y decidas quitártela. Recuérdalo, no necesitas nada ni a nadie que te complete. Tú eres, en ti misma, un universo.»
David en la novela ‘Un cuento perfecto’.
«Vuelve, Margarita»
En el primer desenlace, Margot y David se encuentran frente a frente en las puertas de la estación de Atocha. Ha llegado el momento de despedirse para siempre. David no se atreve a ir tras ella, y aunque el recuerdo del otro sigue presente, ambos deciden continuar sus vidas por separado.
La empresaria se muda a Londres y allí conoce a un chico con el que rehace su vida y es muy feliz. Mientras, en Madrid, David es propietario de una floristería; él también es feliz. Han pasado tres años y Margot lo visita para contarle que ha encontrado a una persona. Se despide para siempre dejando atrás el cartel de su tienda. «Vuelve, Margarita».
«Vuela, Margarita»
Sin embargo, la historia no acaba aquí. Esta vez, David sí sale corriendo tras Margot en la estación de Atocha. Sus vidas han cambiado, han dejado atrás a sus ex parejas y han madurado. David abandona por fin el sofá de sus amigos. Por su parte, Margot triunfa en el trabajo y le plantea irse a Londres juntos.
En este segundo final los vemos felices disfrutando de su amor. Él ha abierto una floristería en la que Margot se cruza con la persona que pudo ser su pareja, haciéndonos ver cómo una decisión puede cambiar nuestras vidas por completo. Pero esta es su historia, este su final, el desenlace de su cuento perfecto. «Vuela, Margarita».
Y tú, ¿con qué final de ‘Un cuento perfecto’ te quedas?
Imagen destacada: @betacoqueta
