En Why Not Magazine hemos podido hablar con Myriam M. Lejardi, una de las autoras nacionales que están revolucionando el New Adult, por el lanzamiento de su última novela. ‘Tres (no) son multitud’ (Elastic Books) es la ansiada continuación de ‘Cómo (no) enamorarse’.

La exploración de las relaciones interpersonales desde el prisma del humor es el fuerte con el que Myriam pisa en el sector editorial desde hace tres años. Ya en el confinamiento de 2020 supo hacer de la situación una historia de lo más entretenida, desenfadada y divertida. Sus lectores y lectoras, encantados con su obra y, por qué no decirlo, con sus redes sociales, reciben con entusiasmo su lanzamiento más reciente. ¡Así se empieza bien el año!

WHY NOT: ¿Cómo ha sido la experiencia de plasmar tantas dinámicas diferentes entre tres personajes? ¿Qué ha sido lo más complicado? ¿Te has sorprendido a ti misma en algún momento? 

Myriam Lejardi: Ha sido horripilante. Si ya me resulta complicado que dos personajes se enamoren, que tengan su conflicto de pareja y su conflicto personal, introducir a un tercero en esta dinámica ha sido todo un desafío.

Sentía que tenía que contar cuatro historias en una sola. Así que lo más sorprendente fue conseguirlo. Una vez terminé la novela y la volví a releer por nonagésima vez, cuando me di cuenta de que todas esas idas y venidas tenían sentido, me costó creérmelo.

WN: Este segundo libro tiene un tono menos alocado y caótico que el primero (aunque no menos divertido). ¿Tenías pensado que fuera así, más profundo e intenso, o simplemente sucedió?

ML: Cuando escribí el primero, no me paré a pensar en cómo sería el segundo. Quizá sí que lo visualizara del estilo, más distendido de lo que ha acabado siendo. Pero en el momento de empezar a planificar la novela, cuando decidí qué era lo que quería contar, supe que sería muy distinto.

Me resistí al principio, de hecho, el primer tercio de la historia lo cambié varias veces, pero, al final, resolví que era preferible hacerlo un poco más intenso y no quitarle hierro a los problemas que planteaba que frivolizarlos.

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WN: Cuando leo tus libros me encuentro con situaciones de lo más divertidas y me lo paso en grande. Siempre tengo la sensación de que tú también te diviertes escribiendo. ¿Es así o hay más sufrimiento del que parece detrás de tus novelas?

ML: Hay mucho sufrimiento (soy una dramática, sí). Me lo paso bien con algunas partes, escenas concretas, o cuando estoy en la recta final y tengo que atar cabos y cerrar lo mejor posible. Pero el comienzo, da igual qué historia sea, siempre lo sufro y le doy muchísimas vueltas. Puedo necesitar un mes (o más) para el primer tercio y escribir lo demás en otro mes.

Aunque adoro contar historias y no sabría estar sin hacerlo, me cuesta horrores. Antes, cuando no había presión porque no iban a publicarse, sí que conseguía disfrutar más todo el proceso.

WN: El género ‘romcom’ está en auge en España y tú, indudablemente, lo has coronado en más de una ocasión con tus novelas. ¿Tienes pensado seguir escribiendo en este género?

ML: Sí, las comedias románticas me encantan y la mayoría de las ideas que se me ocurren encajan en el género, pero sí que me gustaría probar otras cosas. De hecho, yo empecé escribiendo fantasía oscura, pero también me interesan las distopías y el thriller juvenil.

WN: En la misma línea… ¿Qué es lo que más disfrutas al crear una romcom? Y, por el contrario, ¿cuál es el mayor desafío?

ML: Lo más divertido es poder hacer humor utilizando situaciones cotidianas, con las que cualquier persona pueda sentirse identificada. Generar un momento ridículo en un Mercadona o en un examen de Matemáticas. Me gusta crear personajes de andar por casa y es muy sencillo conseguirlo con la comedia romántica.

El mayor desafío, por otro lado, es hacer reír. A veces pienso que sacar una lágrima es más sencillo que una carcajada, porque a casi todo el mundo le afectan las mismas cosas (por supuesto, hay que hacerlo bien). Mantener el mismo tono cómico a lo largo de toda la historia tampoco es sencillo, hay que hacer equilibrios al final, cuando explosiona el conflicto que hayas preparado. Eso sin contar con que hay ocasiones en las que yo, como autora, tengo días malos. Cuesta apartar tus problemas y ponerse a contar chistes.

 

 

Imagen principal: Myriam M. Lejardi presenta ‘Tres (no) son multitud’