El pasado jueves 9 de febrero, la cantautora castellano-manchega Nía Zalén interpretó su repertorio de canciones ante los comensales del restaurante.

Nía Zalén es una artista emergente que canta desde que tiene uso de razón. Su voz aterciopelada, pero con carácter, tiene raíces que sustentan su vida, tierra, campo y aire que marcaron su infancia. ‘El bosque de tu silencio’ y ‘Camino de vuelta’ son algunos de sus temas más conocidos y que más puertas le han abierto en la industria musical.

Una velada íntima y cercana 

El concierto comenzó con unas palabras muy especiales para Nía: «Cuando las cuerdas se rompieron y las cuerdas enloquecieron y fue digno de sentir, pues en un seísmo suicida no cabía un futuro…”. De esta emocionante forma comenzó su actuación, acompañada en todo momento por el sonido de una guitarra a manos de Miguel Sagrado. 

La primera canción que interpretó se llama ‘El bosque de tu silencio’ y es una de las baladas más importantes de su proyecto musical. Además, quiso interactuar con el público durante toda la canción y se creó un ambiente muy familiar y acogedor. Todos los comensales aplaudían y no quitaban el ojo a la cantautora. 

Nía Zalén interpretando uno de sus temas más íntimos | Fuente: Ariadna Canals-Why Not Magazine

Las sorpresas no faltaron en el encuentro musical

Nia Zalén tiene un estilo muy propio, inspirado en su tierra y muchos recuerdos de su infancia. Sus referentes musicales son Silvana Estrada, Natalia Lafourcade, Zahara, Rita Payés, Guitarrica de La Fuente y Pedro Pastor. Además, siente mucha admiración por amigos de la industria que han colaborado con ella en alguna de sus canciones.

Una de las sorpresas que nos tenía preparadas fue con la canción ‘Veneno’ de C Tangana, en la que pidió a Claudia Martín, compañera de profesión, que le acompañara en su versión de este tema. Quedó una colaboración preciosa, sus voces conectaron perfectamente y no descartamos que en otro concierto nos interpreten una canción juntas. 

Nía transmite paz en todas sus canciones. Es musicoterapeuta y como bien dice ella, «la música es una herramienta de terapia y en mi proyecto veréis la conexión entre el arte y la terapia». De hecho, uno de los momentos más especiales que vivimos fue cuando la intérprete nos pidió que cerráramos los ojos y pensáramos en un lugar tranquilo y agradable. De esta forma, la música nos transportó a este espacio donde todos los presentes sentimos mucha paz y tranquilidad. 

nía zalén

Nía Zalén junto a su guitarrista Miguel Sagrado en su concierto de Madrid | Fuente: Ariadna Canals-Why Not Magazine

Canciones que quedarán en la intimidad

Nía conecta con su público de una manera alucinante. Es de las pocas artistas que consigue que los comensales de un restaurante presten más atención a la cantante que a la propia comida o a sus acompañantes. Nía, además, quiso regalarnos dos canciones que no han salido a la luz y que “seguramente no salgan”. Son ‘Intermitente’ y ‘Sudor helado’. Dos temas con mucho sentimiento que cuentan parte de la historia de la artista. 

Como veis, Nía es una artista con mucho potencial y una personalidad muy propia. Su proyecto musical está en pleno crecimiento, así que ¡os animamos a que no la perdáis de vista!

 

 

Imagen destacada: Ariadna Canals- Why Not Magazine